Cada vez más organizaciones sociales y ecológicas abogan para que cambiemos nuestros hábitos de consumo, adaptándolos a nuestras necesidades, y que optemos en el mercado por opciones que favorezcan la conservación del medio ambiente y la corresponsabilidad
Además nuestra salud depende en gran medida de los productos y servicios que adquirimos, tanto alimentos como productos de uso cotidiano ( limpieza, cosmética… )
Una breve lista de pautas a seguir es:
- Considerar el impacto ambiental de nuestro consumo, valorando los procesos de producción, transporte, distribución y residuos que deja el producto.
- Determinar qué empresas, productos y servicios, respetan el medio ambiente y los derechos humanos.
- Plantear el tipo de comercio que se desea favorecer.
- Asegurar la calidad de lo comprado.